Técnicos de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) comenzarán a realizar relevamientos para determinar si la casa de Juan B. Terán financiará las medidas transitorias reclamadas en el proyecto de comedor universitario elaborado por las asambleas del movimiento estudiantil en lucha. En especial, se realizarán evaluaciones edilicias en la facultad de Filosofía; sobre todo en el espacio donde actualmente funciona un comedor autogestionado por estudiantes.

A esa conclusión arribó ayer, en su debut, la comisión creada por el Rectorado para analizar distintos proyectos que tienen como objetivo la reapertura de comedores estudiantiles. Este equipo- que volverá a reunirse desde las 10 de hoy- está integrado por funcionarios de la UNT, por consejeros superiores y por representantes de los manifestantes y de los centros de estudiantes. Por las autoridades participaron los secretarios de Política Administrativa y Gestión (Mauro Feldman), de Planeamiento (Carlos Prieto) y de Bienestar Universitario (Mauricio Argiró) y los subsecretarios de Extensión (Ricardo Zupán) y de Bienestar Estudiantil (Rodrigo Alderete). Por los estudiantes en lucha asistieron Silvina Pereda, Pilar Nicolay, María Sol, Santiago Calvo, Joana Reyes, Matías Lépori, Mario Corbera y Nataly Dorfmüller. En nombre de los centros de estudiantes estuvieron Hernán Romano, Martín Rivas, Benjamín Acuña, Blas Torres, Fernando Arizaga, Florencia Argiró, Agustina Ibarra, Belén Bobba, Matías Zurita. Y por el Consejo Superior, Ángel Morales (no docente) y Patricio Sanna (primera minoría estudiantil).

Al iniciar la reunión, Feldman aclaró que ni en el actual presupuesto ni en el de 2014 está contemplada una partida para el comedor. "Si queremos gestionar y conseguir presupuesto debemos contar con elementos contundente que avalen el pedido", señaló. Los funcionarios precisaron, en reiteradas ocasiones, que la inscripción al programa de la Secretaría de Políticas Universitarias de la Nación, por el que se podría conseguir recursos, vence dentro de exactamente un mes.

La discusión, por momentos, se dispersó. Incluso, desde el grupo de los centros de estudiantes y desde las autoridades lanzaron no pocas indirectas para que los estudiantes que mantienen tomadas las facultades levanten esta medida.

En todos los casos, los alumnos respondieron que no estaba en discusión la toma, y que sólo la asamblea tiene potestad para decidir el levantamiento.

Este sector insistió en que debían discutirse las medidas transitorias incluidas en el proyecto de comedor que se elaboró durante las tomas. Básicamente, este contempla que la UNT financie el comedor que funciona en la toma de Filosofía -que hoy cumple 45 días corridos- y que incluya becas para los estudiantes de otras facultades.

Los representantes de los centros de estudiantes plantearon otras posibilidades, que no excluían la otra.

Tras un debate que llevó más de tres horas, las autoridades universitarias señalaron que para determinar con precisión la factibilidad de que el Rectorado financie cualquier comedor transitorio, debían realizar relevamientos técnicos. Para ello, propusieron evaluar la condición edilicia del comedor vigente de "Filo" e impulsar, con celeridad, un censo para conocer cuántos alumnos harían uso de la solución temporal.

Los estudiantes que mantienen las tomas dejaron en claro que no se impedirá el ingreso a ningún técnico; pero aclararon que ellos llevarán también peritos de parte.

Las inspecciones se darían, con mayor seguridad, a partir del martes. La comisión volverá a reunirse desde las 10 de hoy.

Voces del encuentro

Tres aspectos.- "Las cuestiones técnicas, económicas y legales deben ser atendidas para poder avanzar, tanto en el marco del proyecto definitivo de comedor como en las medidas transitorias. El espacio debe ser el adecuado, estar en condiciones para receptar un determinado flujo de gente. Debemos hacer un estudio estadístico para ver cuántas personas usarán el comedor. Y eso lleva tiempo y esfuerzo", dijo el secretario de Bienestar Universitario, Mauricio Argiró. Agregó que cuando se conozcan los resultados del estudio contable, el secretario de Política Administrativa y Gestión, Mauro Feldman, estará en condiciones de saber si la UNT puede financiar, con fondos propios, comedores temporales.

Experiencia 2005.- "No salimos satisfechos, pero tampoco con una mirada tan negativa. Sabemos que esto es un proceso de trabajo y estamos dispuestos a hacerlo. No queremos repetir lo que pasó en 2005: en aquella ocasión también se comprometieron y luego no hubo presupuesto", dijo Nataly Dorfmüller, vocera de "Filo".

Voluntad política.- "Se puede avanzar, mediante el diálogo. Hay voluntad política del Rectorado; esto es una prueba fehaciente del caso. Todo el estamento estudiantil, los que están en la toma y los que no estamos de acuerdo con esta, debe estar unificado para llegar al comedor", dijo el consejero superior estudiantil Patricio Sanna.